La ausencia de presupuestos, infraestructura y rumbo cultural

Fredo Godínez

 

Aún hay mucho por hacer en material cultural y no se diga en el ámbito escénico. Los avances que había logrado la comunidad artística de México se pararon o anularon con la presente administración cultural, ya sea por una nula comprensión del manejo y administración del presupuesto cultural o por aceptar que el dinero se vaya a los grandes proyectos del Presidente de la República Mexicana que poco o nada tienen que ver con el ámbito cultural.

 

En las planificaciones culturales existían dos visiones: mejorar y aumentar la infraestructura cultural o apostar por mayor presupuesto para diversos eventos de índole cultural. Por otro lado, la presente administración optó por inventarse una nueva forma de ver el mundo: creación de la austeridad republicana devenida en: despido de personal del ámbito cultural, disminución de presupuesto para apoyos a cambio de un aumento de programas, retraso de pagos a artistas y trabajadores de la misma Secretaría de Cultura Federal; entre otras cosas que se han realizado sin medir consecuencia alguna.

 

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su Artículo 4º, dice:

 

“Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura y al disfrute de los bienes y servicios que presta el Estado en la materia, así como al ejercicio de sus derechos culturales. El Estado promoverá los medios para la difusión y desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones con pleno respeto a la libertad creativa. La ley establecerá mecanismos para el acceso y la participación a cualquier manifestación cultural[1]”.

 

Y quiero suponer que tomando en cuenta lo plasmado en la Constitución, a meses previos del comienzo de su gestión, es que Alejandra Frausto realizó una serie de mesas de diálogo: arquitectura y diseño, artes visuales, cine, cultura comunitaria y de paz, cultura digital, cultura infantil y cultura joven, danza, economía cultural, gobernanza, letras e industria editorial, música, patrimonio inmaterial/culturas populares, patrimonio cultural material y teatro; que a su vez estaban contenidos en 4 ejes rectores: redistribución de la riqueza cultural, cultura para la paz y la convivencia, inclusión y equidad, y vida creativa e industrias artísticas y culturales. Todo esto, pienso, con la finalidad de comprender y conocer el fenómeno y así saber cómo crear un correcto desarrollo dentro de su administración.

 

Sin embargo, los escándalos, la falta de pagos, la desaparición de muchos programas culturales y la escasa o nula comunicación con la comunidad artística han sido la constante de esta administración.

 

A raíz de esto, me invaden varias preguntas que externaré:

 

  • ¿Cuál fue el diagnóstico que dichas mesas le arrojaron?
  • ¿Ese diagnóstico en qué o cómo está reflejado en el Plan Sectorial de Cultura 2020-2024?
  • ¿Por qué se tardaron prácticamente dos años en trazar dicho plan si máxime se tiene un año de colchón para operar con el presupuesto y plan trazados por la anterior administración, y al siguiente año ya tendrían que presentar su propio plan con base en los trabajos realizados durante la entrega/recepción y periodo de transición?

 

Según este Plan Sectorial de Cultura 2021-2024[2], México cuenta con la siguiente infraestructura:

 

El Sistema de Información Cultural de la Secretaría de Cultura indica que el país posee 1,387 museos, los cuales se encuentran en 574 municipios, en los que habita 65.9% de la población nacional; las 2,157 casas de cultura y centros culturales se encuentran distribuidas en 1,152 municipios del país, en donde reside 85.7% de la población y los 678 teatros se encuentran distribuidos en 208 municipios, cuya población corresponde a 49%. La infraestructura cultural mejor distribuida conforma la Red Nacional de Bibliotecas de la propia Secretaría, que se encuentra presente en 92.6% de los municipios donde habita 99.6% de la población.

Recurso Cantidad 2019 Habitantes por recurso*
Red Nacional de Bibliotecas Públicas 7,456 16,977
Centros culturales y casas de cultura 2,157 58,682
Museos 1,387 91,260
Auditorios 906 139,710
Galerías 885 143,026
Complejos cinematográficos 821 154,175
Teatros 678 186,693
Zonas arqueológicas abiertas al público 192 659,259
* Población proyectada 2019: 126,577,691 habitantes.

Fuentes: Secretaría de Cultura, Sistema de Información Cultural, 2019, y Consejo Nacional de Población, Proyecciones de la Población de México y las Entidades Federativas 2016-2050.

 

 

Tomando en cuenta que uno de sus principales objetivos es la descentralización, hago lo siguientes cuestionamientos:

 

  • ¿Por qué no se presentó un plan para que girará la exposición de Modigliani o Zapata después de Zapata en las diversas capitales de cada Estado?
  • ¿Por qué seguimos sin conocer un plan para que las obras apoyadas o producidas con dinero de la Coordinación Nacional de Teatro se presenten en los diversos espacios escénicos que se encuentran en todo el país?
  • ¿Por qué no se ha presentado un Programa de Circuito Teatral que permita a las agrupaciones y/o artistas escénicos de todo el país, presentarse en diversos Estados?
  • ¿Por qué no se ha presentado un calendario de capacitación que permita que creadores de todo el país impartan talleres a lo largo y ancho de toda la república, de tal forma que se incentive la descentralización y desregionalización del arte escénico?
  • ¿En verdad cada Estado tiene la suficiente infraestructura escénica gubernamental para albergar buenas producciones nacionales e internacionales?
  • ¿Se cuenta con instalaciones dignas y de calidad para contribuir a un correcto desarrollo de las compañías escénicas en cada Estado, similar al Centro Cultural del Bosque o Complejo Cultural Universitario de la UNAM?
  • ¿Merece o no merece la pena que Federación, Estado y Municipios inviertan para crear una gran infraestructura cultural que permita el correcto desarrollo de las diversas artes escénicas de todo el país?

 

A diferencia de muchos gestores e integrantes de la comunidad artística, yo -junto con Consuelo Sáizar- creo que en todos los estados debería existir una especie de cineteca con un número importante de salas y una especie de CCB, pues ambos espacios/proyectos permitirán no sólo un correcto desarrollo de dichas expresiones artísticas, sino que mejoraría y ampliaría el circuito, al mismo tiempo que representaría un incremente en la oferta laboral.

 

¿Saldrá bien librada la Cultura de tanto golpe?

 

 

 

 

[1] Luis Norberto Cacho Pérez (2018). Derecho Cultural. México: Porrúa. P. 16

[2] http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5596142&fecha=03/07/2020