OLIVIA ORTIZ DE PINEDO: APOSTAR POR LO QUE ENTRETIENE

Platicamos con la productora Olivia Ortiz de Pinedo quien apuesta por lo que le gusta y para producirlo no se mete en tanto lío.

Por Johana Trujillo (@jOtrujilloA)

Oli es de las que va a ver obras y cuando le encantan lo twittea. Le importa que le dejen tema de conversación y no le aburran. Nos recomienda “Urinetown. El musical de Broadway” que va a estar en el Teatro Milán hasta el 5 de abril, los jueves a las 8:45pm. “Es un musical de lujo. Es una compañía queretana. La traducción está bien hecha, los arreglos…”, me dice.

Es mala para lidiar con el estrés.

—Me he vuelto muy solitaria, me gusta estar sola en mi casa, leer, no hablar con nadie. Me aíslo, llega el sábado y me olvido del trabajo. Eso me ayuda. No me gusta desquitarme con la gente.

Le ayuda recordar lo que aprendió cuando empezó a leer Kabbalah: “Si no está saliendo como yo quiero es que tiene que haber otro camino. Y yo no lo estoy viendo.” “En lugar de desesperar, relájate y busca un mejor modo”, se dice a sí misma.

Lleva desde 2009 haciendo producción teatral después de ser “diez años godín en las áreas de marketing, relaciones públicas, patrocinios, publicidad, promociones, todo eso. Trabajé en corporativos, agencias y cuando estaba estudiando mi maestría en mercadotecnia en 2006-2007, mi proyecto final era hacer una asesoría a una empresa. Yo quería hacerla a la empresa de mi papá y mi tío que llevaban veinte años con la empresa y nadie había escucha de Espectáculos Espejo. Hice un estudio que se los presenté y les dije “tienen que cambiar el nombre a Ortiz de Pinedo Producciones”, finalmente lo que conocen es el apellido. De donde nos viene el legado es del apellido, es del abuelo y es de toda la familia: mi bisabuelo, mi bisabuela, mi abuelo, mi tía, mi tío, mi papá, mis primos… todos. Es de familia.”, recuerda.

Cuando les presenta el proyecto su respuesta fue: “¿no quieres venir a trabajar con nosotros?”

—Acababa de tener a mi bebé, había renunciado a mi trabajo de godín. La idea, muy en el fondo, era que me invitaran a trabajar. Y lo logré. Yo siempre había querido trabajar en teatro, quería ser actriz. Hice teatro en el Tec de Monterrey, pero nunca fui de pedirle un favor a mi tío. Nunca me sentí la gran artista por más que yo quería ser actriz.

La primer obra que estaban por presentar era “Doce hombres en pugna”. La película era una de sus favoritas cuando niña.

—Cuando mi tío dice que la va a traer…yo de “jala cables”, de lo que quieras, pero quiero estar. Participé como pude porque el proyecto me llamaba mucho la atención. A mi me gusta mucho aprender, nunca entré con actitud de “yo lo sé todo”, en absoluto. Yo entré como “quiero aprender de qué se trata esto porque no conozco”. Tuve la oportunidad de participar en producciones bien padres. Después de “Doce hombres en pugna”, siguió “Doce mujeres en pugna” que prácticamente fue mi primera producción porque mi tío nos dejó a mi primo Pedro y a mi a cargo. Después de haber tenido que lidiar con doce mujeres, una alternante, directora y dos asistentes de dirección… Eran 17 mujeres, mi primo y yo. Mi primo me aventó al ruedo: “ve tú, yo ni siquiera puedo entrar a camerinos”. Fue una producción muy complicada por trabajar con puras mujeres, un elenco muy grande y luego de ese nivel… fue impactante. Cuando terminó la temporada varios me dijeron “Oli, ya te graduaste, lo que te venga después va a ser papita porque lo que viviste ahí no cualquiera. No cualquiera logra sacar una producción de ese tamaño”. Para mí fue como mi graduación. Un curso intensivo.

Produjeron “Todos eran mis hijos”, “Rain Man”, “La güera Rodríguez”, “El Coleccionista”, entre otras.

—Fueron producciones muy grandes con elencos fuerte y buenos textos. Cuando dejé de trabajar con ellos, una amiga y yo pusimos un negocio de otra cosa, pero yo quería regresar al teatro sólo que tenía mucho miedo a tomar el liderazgo. Tanto hice caso a quien me dijo “tu tienes que producir, sí puedes” que me aventé con “Amoratados” que fue mi primera producción con London Producciones y que duró un año. Tuve que aprender a llevar las riendas de un proyecto. Lo agradezco mucho porque me posicionó, la gente me conoció por eso. Me aventé mi maestría en producción de teatro porque fue darme cuenta lo que era producir. Cuando estaba con mi tío había muchas cosas que yo no hacía y que ni me enteraba.

***

Olivia cree que para acercar a la gente al teatro lo que hay que aprender es a elegir buenos textos, hacer un montaje “digno con calidad, no tiene que ser la mega producción.”

—El teatro que me gusta hacer no me meto en tanto lío. Me gusta el teatro más sencillo, incluso de pocos actores pero me interesa que los textos sean buenos. Y sobretodo, lo más importante es que entretengan a la gente. Que la gente mantenga el interés en lo que está viendo en el escenario, para mí eso es esencial. Y con lo que yo he hecho es lo que yo he intentado que suceda. También que esté bien ejecutado, porque hay buenos textos pero te estas jeteando, están mal dirigidos, están mal actuados…

Extraña mucho “el proceso completo de elegir el texto, elegir el elenco, trabajar con el directo, trabajar con el escenógrafo. Solamente lo hice dos veces, con “Amoratados” y con “De Príncipes, princesas y otros bichos” que ya estaba [producida] pero hubo un trabajo de vestuario, escenografía, cambió la música. Después de “De Príncipes…” tuve la oportunidad de tomar el Teatro NH. Yo quería seguir dedicándome a producir, ya tenía un teatro, pero no es tan fácil. Me ha costado mucho administrarlo, aprender a dirigirlo y he tenido que abocarme ahorita a esa parte. Lo que ha sucedido es que producciones que vienen armadas o medio armadas me piden apoyo. Me sumo como co-productora con un nivel menor de intervención. Ya extraño y ya quiero tener mi propio proyecto. Estoy en búsqueda de textos para que uno que me enamore lo quiera hacer.

¿Cómo le hace para saber si las producciones por las que apuesta son o serán triunfadoras?

— Honestamente, lo me gusta a mí. No sé si está bien o mal, pero me guío por eso. Si a mi me entretiene, me parece relevante, busco apoyarlo. Por ejemplo, ahora con el Ciclo de Mujeres Poderosas ¿por qué están ahí? Porque yo los vi, porque me gustaron. El de “La Verdura Carnívora” me fascinó. Abril Mayett me había insistido que fuera a ver ciertas obras que ella estaba dirigiendo. Me había dicho que fuera a ver “La Verdura Carnívora”. Me avisó que iba a tener una reposición en el Teatro Coyoacán. El teatro es muy bonito pero el estacionamiento es pequeño, esta muy oscura la zona, es conflictiva. Era una noche de lluvia, el estacionamiento ya estaba lleno. “Voy a dar la vuelta, si encuentro lugar me quedo, si no es señal de que no, no me voy a quedar aquí a perder mi tiempo”. Qué talento, riéndome todo el tiempo.

Mientras le entretenga apuesta por ello, se guía por su sentido común. “Confío en los criterios de personas que sé que saben mucho más que yo de teatro, que son artistas pero que tienen un criterio que yo comparto. Si coincidimos en algo que nos gusta es que no estoy tan mal, no tengo que ser artista para darme cuenta de que este producto es sumamente valioso”, concluye.

PRIMER COLOQUIO NACIONAL DE TEATRO

PREOCUPACIONES COMPARTIDAS POR REACTIVAR LA INDUSTRIA TEATRAL
Por Johana Trujillo (@jotrujilloa)

A finales de 2016 un grupo de administradores y responsables de teatros de la CDMX se reunieron con el fin de identificar y analizar diversas problemáticas que atañen a todos los centros culturales dedicados a la exhibición de espectáculos teatrales. Estas reuniones dieron pie a la creación de la RECIO (Red de Espacios Culturales Independientes Organizados de la CDMX), asociación civil que en su objeto contempla incidir en política pública con el fin de mejorar el carácter regulatorio de los espacios teatrales independientes, así como la operatividad y manejo de los espectáculos públicos, en específico, de los espectáculos teatrales.

En entrevista con Samuel Sosa, integrante de RECIO y adminsitrador del Teatro La Capilla, comentó que la idea de organizar el Primer Coloquio Nacional de Teatro en la Ciudad de México nace a partir de las juntas que tuvieron creyendo conveniente traer esa conversación al espacio público y analizar qué pasa en el sector teatral. Indagar en la existencia de una industria teatral para dimensionar el tamaño de lo que hacen y, con conocimiento de causa, generar propuestas y regulaciones acordes al tamaño de la economía que son.

“Estamos tan, tan lejos de siquiera saber de lo que estamos hablando cuando hablamos de economía teatral que hay que empezar por un lado. Hablar de la industria o de la falta de industria, de la económica o la falta de economía como un primer paso para empezar a medirnos y tener claro qué somos hoy, hacia dónde queremos ir y qué vamos a hacer.”

Para el también productor teatral es necesario entender la industria a la que se dedican, medirla, evaluarla, diagnosticarla para poder re-evaluar todas las políticas públicas, programas e incentivo a la industria cultural con un objetivo de corto, mediano y largo plazo. “Toda la política cultural, en particular la que está dirigida a las artes escénicas y al teatro, se ha implementado con muchas buenas intenciones pero sin una ruta clara de qué es lo que se busca. Ese es una gran problema.”

“Por otro lado, creo que la creación de público cojea del mismo pie porque todo mundo habla mucho de la creación de público, de la falta de público, de la incapacidad de las artes escénicas para atraer gente a las butacas, sin embargo, la realidad es que no sabemos si ha habido un crecimiento, dónde lo ha habido. Los casos de éxito ¿cómo se pueden medir? No hay data.“

El sector tiene interés por crear los datos que les permitan tener información precisa sobre su industria, lo que no tiene son herramientas para recabarlos. “Todos están de acuerdo en la necesidad de que exista esa data. ¿En quién recae la responsabilidad de generarla? ¿cuáles son los permisos importantes? ¿dónde centrar los estándares de medición? Nadie lo tiene claro y es una bolita que se viene pasando todo el mundo desde hace años. Las pocas estadísticas que levanta CONACULTA o Secretaría de Cultura son insuficientes, están centradas en el sector cultural global. Hacia la individualidad de las artes escénicas y el teatro en particular no hay herramientas de medición.”

“No estamos articulados como gremio ni como industria y eso es grave. Es grave que a estas altura no existan las herramientas para que esa información se colecte. Esa información es la zona cero, de ahí hay que partir.”

El objetivo de todo el coloquio “es hablar con mucha sinceridad y honestidad entre todos los participantes del gremio de la necesidad de crear una ley nacional de teatro, muy en el mismo camino que la industria cinematográfica lo hizo hace 30 años. Hace treinta años exigió el decreto de una ley nacional de cinematografía que dio pie al Instituto Mexicano del Cine (IMCINE). El IMCINE, con todo lo perfectible que sigue siendo es un acierto en muchos sentido porque por un lado contuvo la burocratización de la industria cinematográfica en un único instrumento, lo que permitió que el dinero destinado al sector llegara realmente a las producciones y creativos, en lugar de desperdiciarse en aparatos burocráticos.”

“Yo creo que la industria teatral padece mucho eso. Tenemos un INBA, un FONCA, una Secretaría de Cultura, Sistema de Teatros, en fin, hay una cantidad de aparatos burocráticos y todos operan con poco presupuesto porque no tienen más y lo que hay se va en que existan. Si desaparecen a partir de una ley, y de la creación de un Instituto Mexicano de las Artes Escénicas podemos eficientar el ejercicio presupuestal, destinarlo realmente a la producción y a los creadores. Y el Instituto tendría que, de la misma forma que lo hace el IMCINE, hacer una evaluación anual del crecimiento de la industria, que en eso, la industria cinematográfica nos lleva años de ventaja.”

“Aunque suena complicado, cada vez es más insostenible estar metidos en la misma canasta de Cultura. Los EFIARTES son un gran ejemplo de que estar compartiendo convocatoria con las artes plásticas y las orquestas sinfónicas es raro porque nos dedicamos a cosas distintas. Creo que salirnos de la canasta de cultura permitiría que se diseñen organismos y modelos de producción ex profeso para la industria teatral. Creo que ese es el objetivo. Vamos a hablarlo porque no estamos diciendo que ese sea el camino a seguir, pero ante la nada se nos ocurrió esto. Es esto lo que queremos conciliar con todas las partes. La razón del Coloquio es esa: qué opinan los directores, los productores, las instituciones, los creativos, los dramaturgos de esta idea como un primer paso hacia ser más eficientes como colectividad.”

“Claramente no está siendo rentable el teatro, parte importante del espectro teatral. Hay ciertas producciones que sí consiguen la rentabilidad pero son las menos y pertenecen a excepciones muy honrosas o a un segmento del espectro teatral en la que no todos somos partícipes, hablando del teatro comercial. Ese es un primer foco rojo, la incapacidad que tenemos como industria de conseguir la rentabilidad, porque al mismo tiempo los modelos de producción están recargados en los estímulos y en la participación del Estado.”

Hay un problema de raíz del consumo teatral que no han podido resolver y que “el Estado está intentado parchar desde hace mucho tiempo y sin éxito. Si no se hace una revisión de fondo, de qué es lo que está pasando, por qué el público está tan rejego a ir a las producciones teatrales, no vamos a poder darle la vuelta nunca, y eso tiene que hacerse desde esa data y ese análisis.”

El Coloquio tendrá como sedes a La Titería, el Teatro La Capilla y el Foro Shakespeare, del 6 al 8 de Noviembre. Representantes de todas las áreas de creación escénica, así como personalidades del sector público, privado e independiente, dialogaran en distintas mesas de trabajo para indagar en la existencia de la industria teatral, los modelos de producción, la creación, el fomento y la generación de públicos, entre otros temas, que les permitan crear un diagnóstico preciso sobre los mecanismos actuales de producción y recepción teatral que reactive la industria teatral y, en un futuro, se cree un Instituto Nacional de Teatro. Las mesas de trabajo contarán con moderadores y ponentes relacionados con el quehacer teatral como: Boris Schoemanna, Luis de Tavira, Martín Acosta, David Olguín, Luis Mario Moncada, Mario Espinosa, Jaime Chabaud, Enrique Olmos de Ita, Itari Marta, José Caballero, entre otros, y productores como Jorge Ortiz de Pinedo, Claudio Sodi, Samuel Sosa y Pablo Perroni por nombrar algunos.

El evento es gratuito y de entrada general, sin embargo, se dará preferencia a quien se registre a través de la página de RECIO bit.ly/ColoquioRegistro y se recomienda llegar 15 minutos antes a la mesa en la que te registraste.



DISTRITO TEATRAL es un blog donde entrevistamos a figuras clave de la escena teatral del país. Creemos en el poder de la cultura para transformarnos al dar sentido a lo que vemos. #amamoslacultura y #vamosalteatro a descubrir qué vale la pena ir a ver, compartir y conversar.Tras nuestras idas al teatro, publicamos reseñas y críticas de lo que vemos en la cartelera teatral no comercial en la Ciudad de México.

Da click aquí si quieres conocer más sobre nosotros.

ARTEMISA TÉLLEZ: ESCRIBIR PARA TEATRO

La escritora y tallerista mexicana Artemisa Tellez, creadora del taller de cuento erótico para mujeres, desde el año pasado se da la oportunidad de escribir teatro. Ahora va por el montaje de su segundo texto.

POR JOHANA TRUJILLO A. (@jOtrujilloA) / FOTO DE SERGIO DOSAL

artemisa-tellez-distrito-teatral-web

Conocí a Artemisa Téllez por el Twitter de Distrito Teatral en 2014 que habíamos decidido abrir una convocatoria para escribir reseñas de manera voluntaria en nuestro portal. Ella fue la primera en ofrecer su tiempo y formarse en crítica teatral para poder escribir.

Artemisa es escritora mexicana, novelista, tallerista, poeta y dramaturga. Creadora del taller de cuento erótico para mujeres. Escritora de la novela lésbica ilustrada “Crema de vainilla”.

De ese periodo de un año que pudimos colaborar juntas en Distrito Teatral, fuimos una vez al teatro. Recuerdo que me contó que su familia tiene relación con el teatro.

 

– ¿Tu familia te generó el interés por el teatro? ¿O en qué momento comenzaste a interesarte por el teatro?

– El teatro me enamoró desde muy pequeña. Recuerdo inclusive la primera vez que fui: fue en el aljibe del castillo de Chapultepec, tenía 3 años. Me impactó ver a uno de los actores (mi tío) cantando ópera desnudo ¡desnudo! eran las 9 de la noche y hacía muchísimo frío… A los cinco años vi una adaptación de la novela de Hesse “Siddharta” y salió un actor de mi misma edad, sentí una enorme envidia y lo primero que hice cuando vi a la directora (amiga de mi mamá) fue decirle que yo también podía “hacer eso”, no sé por qué, pero inmediatamente me dio el papel. De los 9 a los 12 años estuve en su compañía, hicimos una obra por año y fui siempre muy feliz. A los doce que “me retiré” tenía claro que quería dedicarme a escribir, pero nunca dejé de interesarme por el teatro, esa es una pasión de vida y nunca la puedes perder…

 

– Cuéntame ese momento en que decides escribir y después escribir teatro.

– Pues no decidí escribir teatro, deseaba escribirlo, pero no podía. Escribo cuento y poesía desde los 10 años (no estoy diciendo que los grandes cuentos ni poemas desde entonces…) quería escribirlos, los escribía. Unos salían mejor que otros, pero al final había algo, un resultado más o menos satisfactorio para mí. El teatro no. Nunca lo toqué. Y cuando me hice consciente de que lo quería lo intenté una y otra vez sin lograrlo. Aunque como dije antes, soy frecuente espectadora y lectora de teatro, pensé que tal vez necesitaba hacerlo a mayor consciencia, fue por eso que busqué emplearme como reseñista y crítica, sin embargo seguí sin escribir más que fragmentos de algo tan equivocado que nunca me interesé por darle el seguimiento. Hace 2 años, una querida amiga escritora, Reyna Barrera, quien sabía toda esta historia me presentó a Gabriela Ynclán y poco después me incorporé en su taller donde he comprendido la estructura y función del texto dramático y he hecho mis pininos.

 

– ¿Cómo ves el teatro en México?
El teatro en México es un fenómeno. Es gigante, poderoso e indestructible. En un mismo día (entre semana) se presentan más de 10 propuestas en toda clase de foros y para todos los bolsillos. Existe una compañía nacional que regala el 80 por ciento de su boletaje, los jueves de teatro, el teatro universitario, el callejero… Nuestra tradición teatrera es impresionante y la calidad de por lo menos la mitad de las puestas es bastante aceptable. El teatro es una de las poquísimas cosas que me hacen tener esperanza en este país: un portento, maravilla y bendición.

 

– Y en términos de dramaturgia ¿quiénes son los dramaturgos que has leído?

Uy, pues los clásicos… Sófocles, Arstófanes, Shakespeare, Moliere, Ibsen, De la Barca, Chejov, Brecht, Casona, Carballido, Hernández, Garro… Ya con Gabi (Ynclán) leímos a Tremblay, a Genet, Carver, Sánchez Sinisterra, Müller…
También he leído algunos nacionales contemporáneos, como los textos de Adrián Vázquez o Sara Uribe, en la mayor parte de los casos es porque me dio curiosidad cómo sería la dramaturgia a partir de que vi montadas las obras.

 

– Empezaste a escribir teatro con “Hope”, una micro obra resultados de un taller con Gabriela Ynclán, que el público disfrutó. Cuéntame de esa experiencia en el taller, a qué retos te enfrentaste.

– “Hope” fue mi primer intento no fallido, resultado, desde luego, de mi trabajo en el taller de Gabi. Tuve la oportunidad de participar con esta en un proyecto de los alumnos de Ynclán llamado Es-cena (teatro brevelargobreve) y tuvo en efecto, muy buena recepción. Escribir teatro es difícil para mí porque tengo una formación (deformación) de narradora. Cuando narras, las palabras lo son todo. En el teatro lo importante es la acción, no la poesía; ese fue un reto enorme y me requirió varios cursos, lecturas, tareas y fallos entenderlo. Hoy sigo escribiendo y tallereando. Mi siguiente comedia breve (Colorado River) se estrenará el año próximo en el mismo formato.

 

Por ahora, Artemisa está dando talleres en la UNAM, la EME y por su cuenta en diversas sedes. Escribiendo teatro y poesía. Celebrando la reedición de su libro “Fotografías instantáneas” a tan sólo 7 meses de la primera. Escribiendo una entrada semanal para su página web www.artemisatellez.com, donde habla de los temas que le apasionan: escritura, literatura de mujeres, talleres literarios y teatro. Preparando los múltiples festejos al rededor del 10o aniversario de su Taller permanente de Cuento Erótico para Mujeres.

Lo que Artemisa quisiera que viniera es la diversificación. Los últimos 4 años se he dedicado a consolidar los talleres, su público, su trabajo escritural. Lo que le gustaría lograr ahora es ampliar su campo de acción: dar más talleres y en más lugares, llegar a otros lectores, publicar más y participar en otro tipo de publicaciones y eventos. En la parte creativa quiere trabajar obras de largo aliento.

Para seguir los pasos de Artemisa Téllez como escritora, tallerista, novelista, poeta y dramaturga, ella es activa en las redes sociales, la pueden encontrar en Twitter y Facebook como Artemisa Téllez. Tiene una página de autora en Facebook (https://www.facebook.com/LibrosdeArtemisaTellez/?fref=ts) donde anuncia los talleres, cursos, lecturas y todos los eventos en los que participa y por supuesto, en su página: www.artemisatellez.com

Estaremos al pendiente de su próxima comedia breve “Colorado River” que se estrenará el próximo 2017 en el formato de teatro breve.

***
También te recomendamos:
Claudio Sodi, hacer teatro en México
Mujeres en la Cultura: Liset Cotera

DISTRITO TEATRAL es un blog donde entrevistamos a figuras clave de la escena teatral del país. Creemos en el poder de la cultura para transformarnos al dar sentido a lo que vemos. #amamoslacultura y #vamosalteatro a descubrir qué vale la pena ir a ver, compartir y conversar.Tras nuestras idas al teatro, publicamos reseñas y críticas de lo que vemos en la cartelera teatral no comercial en la Ciudad de México.

Da click aquí si quieres conocer más sobre nosotros.

TEATRO A UNA SOLA VOZ

Festival de Monólogos 2017

Teatro a una Sola Voz – Festival de Monólogos es un corredor escénico único en su tipo creado en 2005 para desarrollar el trabajo unipersonal en nuestro país.

Este año se llevará a cabo la decimotercera edición, y consta de siete monólogos provenientes de cinco estados. El Festival se llevará a cabo del 13 de julio al 8 de agosto de 2017, y la ruta tiene previsto visitar Hermosillo, Sonora; Culiacán, Sinaloa; Durango, Durango; Saltillo, Monclova y Torreón, en Coahuila; Nuevo Laredo, Tamaulipas; Ajijic y Guadalajara, en Jalisco; Colima, Colima; León, Guanajuato; San Luis Potosí, San Luis Potosí; Morelia, Michoacán, para clausurar en la Ciudad de México.

En la Ciudad de México los monólogos se presentarán del 02 al 08 de agosto en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque. Aquí la programación:

¿Duermen los peces? | 02 de agosto, 20h

Autor: Jens Raschke
Dirección: Aracelia Guerrero
Compañía: Compañía Teatral ReNo
Reparto: Adriana Reséndiz Segura
Dirigida a público a partir de 10 años

¿DE QUÉ VA?
Esta obra hace un recorrido por el duelo vivido: no solo enfrenta el hecho traumático o prepara para lo inevitable, sino que describe a cada paso los distintos momentos que vive Jette, una niña de diez años, antes y después de que muriera de cáncer su pequeño hermano, Emilio.

Dante Gaspar, un hombre en aguas peligrosas | 03 de agosto, 20h

Autor: Goyo Carrillo
Dirección: Michelle Guerra Adame
Compañía: Colectivo de Teatro en Espiral
Reparto: Goyo Carrillo
Dirigida a público a partir de 6 años

¿DE QUÉ VA?
Dante Gaspar es cartero de oficio y hombre de misterios y aventuras por convicción. Tras decidir jubilarse, luego de 35 años, ahora tiene tiempo para cumplir sus nuevos propósitos: regresar las cartas que no pudieron llegar a su destino. Entre éstas, ha guardado una enigmática libreta, sin destinatario ni remitente ni dirección a donde se envía… Dante Gaspar tendrá que romper las reglas del buen cartero y leer un poco del contenido de la libreta para encontrar una pista para dar con el paradero del propietario. Guiado por las pistas que la libreta le entrega, vivirá una aventura como jamás hubiera esperado.

Delirio… 3:45am | 04 de agosto, 20h

Autor: Verónica Musalém
Dirección: Víctor Carpinteiro
Compañía: Delirio 3:45
Reparto: Ángeles Marín
Dirigida a público a partir de 15 años

¿DE QUÉ VA?
Este monólogo habla sobre la fragilidad de la mente y de la vida. Una mujer en un estado alterado tras caer en una profunda crisis nos cuenta el viaje que emprendió para buscarse y reconocerse.

Conferencia sobre la lluvia | 05 de agosto, 19 h

Autor: Juan Villoro
Dirección: Sandra Félix
Compañía Compañía Nacional de Teatro
Reparto: Arturo Beristáin
Dirigida a público a partir de 15 años

¿DE QUÉ VA?
Un bibliotecario entra a escena. Ha ordenado libros y los libros han desordenado su vida. ¿Hasta dónde depende de sí mismo y hasta dónde de lo que ha leído? El intermediario entre los libros y los lectores se busca a sí mismo en una conferencia. Hablará de la lluvia, o más bien, de lo que pasa cuando llueve.

206 espectáculo sonoro santanero | 06 de agosto, 18h

Autor: Aldo Reséndiz
Dirección: Iliana A. García
Compañía: Del Buche al Corazón
Reparto: Eloísa Zapata Esquivel
Dirigida a público a partir de 15 años

¿DE QUÉ VA?
Una mesera de cantina, mujer libre de cuerpo robusto y hermoso, expresa sin miedo su deseo de disfrutar su cuerpo y convivir con los hombres que van de paso por la cantina, aún si eso significa la reprobación social y la renuncia a su papel como madre. La aparición de fantasmas muy familiares y el orgullo herida del cantinero, provocarán un giro inesperado en su vida y la de sus hijas.

León, el bueno para nada | 07 de agosto, 20h

Autor: Francis Monty
Dirección: Hugo Arrevillaga Serrano
Compañía: La Voluntad
Reparto: Leonardo Zamudio
Dirigida a público a partir de 4 años

¿DE QUÉ VA?
A León lo apodan “El bueno para nada”. Es el niño más pequeño de su clase. Cada mañana, en el camino a la escuela, tiene que soportar el acoso y las burlas de sus compañeros. León come clavos y tuercas para convertirse en un tren que pueda escapar de sus perseguidores, pero por ahora lo único que le permite correr más rápido que ellos es el miedo. Su hermano mayor parece ser el niño perfecto e invencible, pero ¿y si no fuera lo que aparenta?

Zoológica. Bestiario escénico para una actriz, títeres y objetos | 08 de agosto, 20h

Autor: Tania Hernández y Adriana Duch
Dirección: Adriana Duch
Compañía: Febrero10Teatro / Teatro de la Idea Clara
Reparto: Tania Hernández
Dirigida a público a partir de 12 años

¿DE QUÉ VA?
En este peculiar desfile de bestias como: una mujer serpiente, perros siameses bailarines, pegasos equilibristas o una antigua princesa azteca, con suerte encontremos algún sueño perdido; vislumbremos fragmentos de nuestra historia personal y colectiva; e incluso, al terminar la función, podamos llevarnos en nuestra memoria, como un souvenir, algún recuerdo de nuestra naturaleza humana-animal.

Para conocer el detalle de la gira completa visita: http://teatroaunasolavoz.blogspot.mx/

CÓMO APRENDÍ A MANEJAR

ASUMIR EL RIESGO DE REPRESENTAR UN PERSONAJE

Por Viridiana Nárud (@viridianaeunice)*

Compartiendo inquietudes sobre el abuso, un grupo de actores se ven en la necesidad de evocar sus propias experiencias a través de la voz de Cosita, la protagonista de esta historia. Una mujer que relata el cómo, desde las piernas de su tío, aprendió a manejar.

Pocas veces salgo del teatro indignada o molesta como en esta ocasión. Cuando uno toca temas sin metáfora tratando de mostrar una realidad y no de revelar, nos enfrentamos no al arte sino a la denuncia de la realidad, valga la redundancia. Así, cuando se denuncia el abuso, se deja visible a la víctima. Por ello, el tratamiento de estos temas necesita una investigación profunda para no abordarse como una mera ocurrencia de la imaginación del dramaturgo.

En “Cómo aprendí a manejar”, la dramaturga Paula Vogel, ganadora del Pullitzer en 1998 por esta obra, pareciera que ha cometido una arbitrariedad al mostrar a una víctima de abuso como marioneta de su fantasía. Sin embargo, al leer la obra, uno se da cuenta que no ha sido por parte de la autora sino por cómo la compañía decidió enfrentar el texto y deshacerlo. Al parecer, quisieron darle un toco más “realista”, pero hay que entender y eso nos lo enseña Aristóteles en la Poética, que no porque las cosas hayan sucedido de esa manera significa que al narrarlas parezcan realidad.

En esta puesta en escena el personaje “Cosita”, una mujer abusada, seducida por su tío es incongruente en su totalidad. No es constantemente incongruente, eso daría una línea lógica a su comportamiento. Así como la estructura narrativa utilizada, no sirve para esclarecer, sino para crear más huecos en la obra. Nos enfrentamos ante una oscuridad e indecisión por parte de la dirección y de entender el personaje. Nos muestra un personaje amorfo e incapaz de tener una personalidad que nos permita la duda del placer y el abuso.

La iluminación y sus experimentos visuales resultan de gran pobreza visual frente al espectador. Distraen a los actores y se encuentra mal iluminado todo el tiempo. Las actuaciones son buenas, desafortunadamente desperdiciadas.

El trabajo de “Conejo con Prisa” resulta una falta de respeto a las víctimas de abuso. Y no es que de deba plantear un ángulo objetivo de un hecho real y dejar que los hechos hablen a favor o encontrar de una situación violenta, sino tener el valor de asumir los riegos que representa tomar un personaje como el de “Cosita” y el “Tío Paco” que se hallan en las líneas poco claras de la perversión, el gusto, la seducción, el vacío y el abuso.

CÓMO APRENDÍ A MANEJAR
Dramaturgia: Paula Vogel.
Dirección: Creación colectiva.
Elenco: Belén Aguilar, Sofía Espinosa, Fernanda Echevarría, Montserrat Cattaneo y Armando Espitia.
Horarios: Lunes y martes 20:00 horas.
Boletos: Entrada general $150. Descuento del 50% a maestros, estudiantes e INAPAM con credencial vigente.
Dónde: Sala CCB del Centro Cultural del Bosque (Reforma y Campo Marte S/N)

* Escritora por necesidad, teatrera por convicción. Ha trabajado como directora, dramaturga y productora teatral, ha presentado obras en foros alternativos como: El Trolebús Escénico, Foro Shakespeare, Pandeo, Lucerna… Muchas veces se ha preguntado el por qué habría de escribir. Llegó a una conclusión: la realidad no le es suficiente. Cree que el mundo exterior tiene que ser revelado a través de esclarecimiento de las ideas y por ello el ejercicio de la crítica es fundamental. Egresada de la Escuela de Escritores SOGEM.

** En DISTRITO TEATRAL creemos en el poder de la cultura para transformarnos al dar sentido a lo que vemos. #Vamosalteatro para descubrir qué #valelapena ir a ver y conversar. También, trabajamos con productores y directores de artes escéncias cuyo reto más importante es que la gente se entere de su puesta en escena y llegar a más audiencia. Los damos a conocer a nuestra comunidad de espectadores de más de 25,000 seguidores. También, investigamos y diseñamos estrategias de comunicación que muestren su valor a las personas indicadas. Da click aquí si quieres conocer más de nosotros.